Según varios estudios, se ha registrado un retraso por parte de varios adultos emergentes quienes buscan lograr una autosuficiencia económica, lo que complica a su vez completar los objetivos planteados. Por eso, asesores patrimoniales aconsejan enseñar a los niños sobre la educación financiera y la gestión de recursos propios, de una manera que estos se les haga fácil de entender, de forma que les sea más fácil lograr su propia independencia en un futuro. Así que, podrías seguir los consejos que hemos dejado sobre el tema.
Dejar a los niños hacer sus propios planes
En esta sociedad llena de tecnología donde se puede conseguir todo con solo un “clic”, los niños pueden desesperarse por siempre tener lo que quieren cuando lo quieren. Por eso, los padres podrían enseñarle la gratificación de ahorrar y la importancia de la paciencia proponiéndoles una lista de deseos, y hacer que ahorren con su propio dinero para comprárselo.
Para esto, es necesario dejar atrás los prejuicios y dejar que los niños compren lo que quieran por sí mismos sin ningún tipo de condición o prejuicio. Así, ellos mismos podrán poner en orden sus prioridades y algunos de los objetivos que se plantearon inicialmente perderán peso, centrándose en cosas más esenciales y útiles que los beneficiarán.
Regalar alcancías
La autora del libro “Make your kid money genius” plantea una táctica bastante interesante para ayudar a los niños a planificar sobre su futuro. Regalarles 3 alcancías: una para gastar, otra para ahorrar y una para donar, y hacer que ellos mismo se planteen sus propias metas y objetivos ¿A qué causa les interesa ayudar? ¿Qué les gustaría comprar?
Este método puede repercutir en edades más tempranas que van desde los 5 a 10 años, haciendo que los niños entiendan las diferencias entre necesidades y caprichos. Además, el uso de pagos donativos también puede ayudarlos a ser más humanitarios.
Dar pequeñas retribuciones
Posiblemente, uno de los métodos más conocidos para enseñar independencia financiera es la de dar pequeñas retribuciones o pagas a los niños a cambio de tareas, cómo puede ser rendir bien en sus estudios o hacer alguna tarea doméstica para ayudar en la casa. Esto es algo que les mostraría el valor del trabajo duro, y puede servir para aprender a realizar tareas básicas.
Además, también se podrían fijar pequeñas metas de ahorro que pueden lograr por realizar ciertos trabajos, cómo puede ser una salida familiar o al cine, o comprar una bici o un videojuego nuevo, así se les mostrará cómo es asumir sus propias responsabilidades y tener cierto grado de independencia.
Usar los métodos de Harv Eker
El libro de Harv Eker, “Los secretos de la mente millonaria”, está lleno de consejos bastante prácticos para educar financieramente a los jóvenes de hoy. Para los niños de unos 6-8 años en adelante podría servir el método por porcentajes, el cual consiste en dividir los ingresos en 6 porcentajes: 55% para necesidades básicas; 10% para ahorro; 10% para formación; 10% para inversiones a largo plazo; 10% para ocio y 5% para donativos, y los gastos que incluye cada apartado. Así, se les mostrará más cómo dividir sus gastos.
Por otra parte, para los adolescentes más conscientes, algo para que se vayan volviendo más independientes es compartirles directamente sus experiencias de invertir en el mercado, incluirlos en videollamadas y reuniones financieras, o abrirles una cuenta broker. Tratarlos cómo adultos ayudará a que vayan madurando y conociendo más para el mundo financiero que los espera.